Muchas minorías hacen una mayoría.

Estamos ante una oportunidad histórica de plantear en México una negación a la imposición de políticos, es importante mencionar el fraude electoral del 88 y del 2006 no como una nostalgia y una solicitud de justicia que permita a la izquierda capitalista llegar a la presidencia  sino como parte de la historia de imposición que como mexicanos hemos sufrido.

El rechazo a Enrique Peña Nieto en la Universidad Iberoamericana deja en claro lo que es la expresión popular –de diferentes sectores sociales ahora nuestra pregunta seria ¿Con esto observamos un rechazo hacia una persona o un rechazo a la política planteada por el capitalismo en sus diferentes expresiones (Obrador, Vázquez Mota, Quadri)?

En nuestro país esta expresión ha tomado fuerza desde el levantamiento del Ejercito Zapatista de Liberación nacional en 1994 y queda en claro cuando el Sub comandante Marcos dice: yo no quiero ser presidente de México, para dirigir la mala política tendría que ser presidente del Mundo y eso tampoco me interesa. También podríamos recordar la expresión de clamor popular en Argentina después de la crisis del corralito en 2001 “Que se vayan todos” y por último los movimientos sociales que observamos el año anterior que evidencian la necesidad de una política diferente alrededor del mundo tienen entre sus frases de protesta ni les creo ni les creeré.

Desde la caída del muro de Berlín termino la idea de cambiar el mundo tomando el poder, no necesitamos hacer una gran conglomeración para disputar el control de la política que siendo capitalista seguirá siendo la misma, lo que necesitamos es hacer una transformación desde nuestro espacio hacer autonomía pero ¿Cómo? Esa es una pregunta que solo el tiempo nos dará por ahora el papel de las personas comprometidas con un mundo mejor esta en seguir negando todo aquello que nos atropella como personas libres, lo que la política neoliberal nos ofrece. Lo que en este momento no podamos revertir será algo que tenga efecto no solo en nuestros hijos sino en nuestra propia vida ya que ellos piensan en tiempo largo.

El hecho de que la sociedad se organice para protestar en contra de un candidato no solo es un llamado en contra de los grandes monopolios de información que transforman la  realidad y con ello dibujan una realidad aparente. Es también un llamado de rechazo hacia la política que en su plataforma contiene al neoliberalismo. Pero lo que observamos es un intento por apoderarse de este esfuerzo ciudadano por parte de diferentes partidos los cuales funcionan pensando en dañar a otro para fortalecer lo suyo, esto tampoco lo queremos, porque no queremos la política de siempre (tampoco propuestas que bajo este argumento se disfrazan y dibujan horizontes neoliberales como Gabriel Quadri), esto es un movimiento ciudadano y es por ello que es necesario organizarnos, vuelvo a tomar una frase de los movimientos que dieron una nueva organización al mundo el año anterior: muchas minorías hacen una mayoría.